El Santo Padre compartió reflexiones durante su encuentro con empresarios y representantes de la Confederación italiana Confartigianato, el sábado 10 de febrero. En su discurso, destacó la complementariedad entre la capacidad de reproducción de las máquinas y la inventiva humana, subrayando la importancia de no dejar que la tecnología suplante la creatividad del ser humano.
El Papa elogió el papel de Confartigianato en el renacimiento económico post Segunda Guerra Mundial, resaltando su evolución hacia la producción a gran escala gracias al uso de tecnologías. Sin embargo, advirtió sobre la necesidad de preservar la imaginación humana frente al avance de la automatización.
En sus palabras, el Pontífice también destacó la conexión entre el trabajo artesanal y la expresión de la creatividad divina a través de las manos del hombre. Reconoció las dificultades que enfrentan algunos en encontrar empleo y alentó a las empresas a incluir a grupos vulnerables como jóvenes, mujeres y migrantes.
Al referirse al trabajo artesanal, el Papa resaltó la capacidad de los artesanos para percibir la belleza en la materia inerte, comparando su labor con la del Creador. Además, destacó la importancia de desarrollar una mentalidad que valore el trabajo y se aleje del consumismo.
Francisco también enfatizó el papel de Confartigianato en embellecer el mundo a través de sus productos y promovió la idea de ser "artesanos de la fraternidad", inspirados en la parábola del Buen Samaritano.
Finalmente, el Papa los animó a ser agentes de paz y expresó su gratitud por su labor, encomendándolos a la protección de san José y pidiendo sus oraciones por él.
